viernes, 14 de junio de 2019

'El extranjero' de Albert Camus


¡Hola a todos! Hoy me gustaría hablaros del que probablemente sea el libro mas deprimente que he leído hasta la fecha. 

¡AVISO!: Si estás interesado en leer esta novela, te recomiendo no leer la sipnosis (letra cursiva) ya que contiene spoilers.

Guía moral e intelectual de la generación llegada a la madurez entre las ruinas, la frustración y la desesperanza de la Europa de la postguerra, ALBERT CAMUS (1913-1960) saltó a la fama con la publicación, en 1942, de EL EXTRANJERO. El relato no es ni un símbolo ni una alegoría, sino una lúcida descripción de la carencia de valores del mundo contemporáneo, entreverada con la añoranza de la coherencia moral y la autenticidad emocional de una humanidad posible. Una serie de circunstancias, cuya lógica no aboca de forma inevitable a resultados predeterminados, conduce al protagonista de la novela a cometer un crimen aparentemente inmotivado; la muerte de Mersault en el patíbulo no tendrá más sentido que su vida, corroída por la cotidianidad y gobernada por fuerzas anónimas que, al despojar a los hombres de la condición de sujetos autónomos, les eximen también de responsabilidad y de culpa.

Así se nos presenta 'El extranjero', del autor francés Albert Camus, en la edición de Alianza Editorial de 1983. Se trata de su primera novela publicada. Entre las obras de Camus destacan El estado de sitio, El mito de Sisifo y Calígula, entre otras.

Este libro me ha decepcionado bastante. En primer lugar, he de confesar que algunos fragmentos de la obra me han parecido un tanto aburridos, siendo ésta la tónica general de toda la novela. La trama se desarrolla lentamente sin que prácticamente suceda nada destacable, y cuando sucede da la sensación de que no afecta al protagonista mas allá de lo evidente. Éste se muestra como una persona bastante peculiar, cuyas reacciones ante los hechos que le rodean y afectan no son en absoluto naturales. Aunque he llegado a empatizar con él en algunas ocasiones, considero que se trata de un personaje extraño al que me cuesta comprender. En cuanto al resto de personajes, algunos son interesantes y otros en cambio pasan totalmente desapercibidos.

Por otra parte, respecto a la ambientación, mas o menos lograda, he de decir que el autor transmite muy bien la atmósfera, a veces asfixiante otras idílica, de Argel, ciudad en la que se desarrolla la mayor parte de la historia.

Sinceramente, no recomendaría la lectura de este libro a menos que estéis especialmente interesados en el autor y su obra.

lunes, 25 de febrero de 2019

'Paisaje de otoño' de Leonardo Padura


¡Hola a todos! Hoy me gustaría hablaros de un libro que salvé del cajón de expurgo de la biblioteca y que me ha sorprendido gratamente.

 Una noche de otoño, unos pescadores descubren un cadáver en la playa del Chivo, en La Habana. La víctima, Miguel Forcade Mier, ha sido asesinada con una saña brutal. Este crimen removerá una antigua trama de corrupciones y viejas ambiciones frustradas, ya que, en efecto, en los años sesenta Forcade había dirigido las expropiaciones de bienes artísticos requisados a la burguesía tras la Revolución. Pero, después de acumular poder, influencia y, seguramente, no pocas envidias y resentimientos, en 1978 Forcade decidió, sin motivo aparente, sumarse al exilio en Miami. Sin embargo, poco antes de su asesinato, había vuelto misteriosamente a Cuba. Como el caso se presenta delicado, ¿quién mejor para dar con el asesino que el teniente investigador Mario Conde, viejo zorro en esos menesteres, al parecer sin nada ya que perder?

Así se nos presenta 'Paisaje de otoño', del autor cubano Leonardo Padura, en la edición de MaxiTusquets de 2013. Se trata de una novela policiaca ambientada en La Habana de 1989 y que pone fin a la tetralogía Las cuatro estaciones, que incluye, además de este título, las novelas Pasado perfecto, Vientos de cuaresma y Máscaras

Este libro me ha parecido una auténtica maravilla. La trama, a pesar de que sigue el esquema típico de este tipo de novelas, se desarrolla de manera magistral. Los personajes están muy bien construidos, sobre todo el teniente Conde y sus viejos amigos. Pero, sin duda alguna, lo que mas me ha gustado ha sido la ambientación. El autor nos guía a través de las calles de La Habana y nos hace partícipes de los sueños frustrados, las ambiciones, el ansia de libertad y el hastío de los cubanos, que se resignan a vivir una vida monótona y llena de grises.

Hace ahora dos años que viajé a Cuba, y la verdad es que lo que vi no me gustó en absoluto, es mas me afectó bastante. La falta de libertad, la escasez de alimentos y el atraso tecnológico están a la orden del día en un país en el que el espíritu de la Revolución murió hace ya mucho tiempo. Teniendo en cuenta que Leonardo Padura reside actualmente en La Habana, no esperaba en absoluto una novela tan crítica con la situación del país y mucho menos que se asemejase tanto a lo que yo pude observar en 2017, teniendo en cuenta que ésta se desarrolla en 1989, lo cual envidencia el fuerte estatismo al que está sometida la isla. Expreso asi mi mas sincera admiración por el autor y mi solidaridad hacia el pueblo cubano, sin ninguna pretensión mas allá de dedicarles esta humilde reseña.

martes, 22 de enero de 2019

'EL CAZADOR'


  Estoy solo en casa, la mesa del salón está llena de cervezas vacías y no me encuentro en condiciones de levantarme para ir a la nevera en busca de algo de comer. Decido quedarme tal y como estoy, tumbado en el sofá. Después de matar a una persona lo último que quieres es irte a dormir estando consciente. El alcohol ayuda a amenizar este problema pero en muchas ocasiones no es suficiente. Una raya de esa asquerosa pasta verde que venden en los suburbios me espera en la mesa, entre restos de comida de hace dos días.

  Después de un buen rato, logro incorporarme, la cabeza me da vueltas y apenas alcanzo a distinguir lo que sea que estén echando por la tele, que está a menos de un metro de distancia. No suelo meterme este tipo de mierda pero teniendo en cuenta que estoy sin blanca y que no cobraré mi recompensa hasta mañana por la mañana, no me queda de otra. Me inclino sobre la mesa y esnifo. La entrada es limpia pero tardará un rato en surtir efecto. Entretanto, decido tumbarme de nuevo y contemplar el techo del comedor. No puedo dejar de pensar en el hijo de puta de Williams y en cómo le volé la tapa de los sesos esta misma mañana. Según las leyes estatales, se supone que a nosotros, los cazadores, no nos pueden asignar piezas con las que tengamos algún tipo de vínculo emocional pero eso a la empresa se la trae floja.

  Conocí a Willy hace diez años, cuando tuvimos que pasar un cargamento de pasta morada al Sector 13. En aquella época el único que trapicheaba con esa mierda en Uets era Eustace la Rata. Eustace nunca me inspiró mucha confianza, pero pagaba bien y necesitaba el dinero para pagar los tres meses que debía de alquiler. En principio, iba a introducir la mercancía solo en el sector pero Eustace me endosó al paleto de Willy a última hora. Al parecer, el padre de éste y Eustace eran primos lejanos, y este último le debía un favor al primero, de modo que hizo lo que todo buen pariente haría en estos casos, ofrecer trabajo al inútil de su sobrino. Por aquel entonces, yo no sabía lo que era un arma y me dedicaba a hacer trabajos de mierda aquí y allá. La mayoría de las veces mi misión se limitaba a transportar la droga de un sitio a otro, cobrar mi recompensa y no hacer preguntas innecesarias que pudiesen sacar de quicio a los tipos con los que trataba. Con el paso del tiempo me fui haciendo un sitio entre los hombres de confianza de la Rata, y fue así como pasé a formar parte del MST, el proyecto personal de Eustace, una milicia urbana formada por los desechos sociales del Sector 5 [...]